La industria alimentaria española se expande en el extranjero

La industria de la alimentación y las bebidas está reforzando su presencia en el exterior, y el número de empresas de este sector que comercializan sus productos en el extranjero ha crecido en 3.336 coincidiendo con los años de la crisis.

Así se desprende de los datos que ofrece la Federación de Industrias de Alimentación y Bebidas, quien detalla que el número de compañías exportadoras ha pasado de las 9.361 en 2007 hasta las 12.697 en 2015 -es un 35,6% más-, tras ocho ejercicios consecutivos de incremento.

Pensar en global, ampliar mercados y no limitarse exclusivamente al consumidor nacional es una estrategia que cada vez tienen más presente estas empresas. En España, según la misma fuente, hay 28.343 compañías vinculadas a la alimentación y las bebidas. Mientras en 2007 solo el 29,9% de estas sociedades formalizaba operaciones de comercio exterior, el año pasado el porcentaje alcanzó el 45%. “El dato muestra la apuesta de las compañías españolas por esta vertiente de competitividad”, significa la Federación.

Mientras en 2007 solo el 29,9% de estas sociedades formalizaba operaciones de comercio exterior, el año pasado el porcentaje alcanzó el 45%

Grupo Empresarial Palacios Alimentación, con sede central en Albelda de Iregua, La Rioja, es una de las miles de empresas españolas que exportan sus productos en el extranjero. Empezaron hace más de 20 años y tienen presencia en los cinco continentes. Sus operaciones se centran en países europeos como Alemania, Bélgica, Italia, Polonia, Inglaterra, Irlanda y Portugal, por citar algunos. “Exportamos productos con los cuales tenemos legitimidad como empresa española (tortillas, chorizos), y productos con los cuales tenemos que competir con empresas internacionales (pizzas o pastelería)”, explican fuentes de la empresa en conversación con bez.es.

La Hoguera, en San Pedro Manrique (Soria), es otra empresa del sector que lleva una década realizando una apuesta “organizada” por el comercio exterior, tras empezar a vender previamente sus productos a países vecinos. Así, esta compañía tiene presencia en países como Australia, México, Alemania, Francia, Portugal, Países Bajos, Noruega, Italia o Filipinas, por citar varios ejemplos. “La experiencia es muy positiva. Nuestro producto (jamón y chorizo español, principalmente) es cada vez más conocido en todo el mundo”, apunta a bez.es el gerente de esta compañía soriana, Teo Martínez.

Si bien el comercio exterior está en auge, y es una vía cada vez más explorada por las empresas, exportar productos alimentarios al extranjero no es fácil. “Cuando se trata de países de la CEE es bastante sencillo. Sin embargo, es más complicado cuando hay que salir de Europa por temas de legislación, requisitos de países, registros, documentos sanitarios,…”, apuntan desde Grupo Palacios.

Las principales dificultades que se encuentran “son las barreras que hay en España a la exportación. Es muy complicado y costoso homologar plantas de producción”, explica Martínez, quien también recalca que otro problema añadido “es la barrera que tienen los derivados del cerdo en la mayoría de los países desarrollados”.

“Aunque tengas las normativas generales para poder exportar (IFS y BRC, principalmente), hay que cumplir requisitos específicos en determinados países que funcionan como restricción a la importación”, relata Martínez, quien agrega que “esto se debe a que el cerdo es un producto muy importante en muchos países del mundo -Estados Unidos, China, Brasil o, por ejemplo, Rusia- y lo protegen internamente”.

Facturación al alza

La facturación de estas empresas fuera de las fronteras españolas ha crecido durante estos años de forma paralela al aumento de las empresas exportadoras. Así, el volumen de las exportaciones ha aumentado un 64% durante el mismo periodo de tiempo, hasta alcanzar los 25.422 millones en 2015. Son 9.956 millones más que hace ocho años.

“Desde el año 2.000 la industria de alimentación y bebidas ha multiplicado por tres sus registros en esta variable”, apostillan desde la Federación, quienes indican que entonces la facturación apenas se situaba en 9.801 millones. “El sector se ha fortalecido ocupando la sexta posición en el ranking exportador de la Unión Europea y la décima a nivel mundial”.

El comercio exterior, de hecho, tiene cada vez más importancia en la cuenta de resultados de estas empresas de este sector

Esta buena dinámica ha elevado la facturación total de la industria alimentaria y de bebidas hasta los 94.938 millones de 2015 -la cifra más alta de la serie histórica-, con un incremento del 15,6% con respecto a 2007. “2015 ha supuesto la continuación de la senda de la recuperación económica en España y, en este contexto, la industria de alimentación y bebidas ha consolidado su posición como primer sector industrial del país”, recalcan.

El comercio exterior, de hecho, tiene cada vez más importancia en la cuenta de resultados de estas empresas: la facturación en el extranjero representaba en 2007 el 18,8% del total de las ventas, mientras que el año pasado este porcentaje se situó ya en el 26,7%.

¿Qué futuro tiene el comercio exterior? Fuentes de Grupo Palacios explican que el mercado interior se encuentra “bastante plano”. Ellos han identificado fuentes de crecimiento importantes en la exportación, por lo que van a seguir apostando por el comercio exterior y la presencia de ferias internacionales.

En la misma línea, el gerente de La Hoguera agrega que tienen el reto de conseguir que las ventas al extranjero representen en su caso el 20% de la facturación. “Nos gustaría que estén bien repartidas por diferentes países, con el fin de diversificar el riesgo y de seguir creciendo”.

Fuente: BEZ